Cuando aguantar el día a día se convierte en reto...

Comenzamos con algo nuevo...
No crean que todo lo que reluce es oro, no crean que la vida es tan bonita a como la pintan porque no es así. ¿Y qué? se dirán algunas de las personas que puedan pasar por este blog. Pues que nada es fácil y hoy por hoy hay que luchar por todo.

Somos muchos los que madrugamos para ir a clase o para ir a trabajar y no es nada fácil tener casi que levantarse sin luz solar, tirarte (en mi caso) 6 horas escuchando a diferentes personas que intentan que aprendas algo nuevo; y mucho menos es fácil para aquellos/as trabajadores/as que durante 8 horas o más deben soportar a su jefe que, lo más probable, sea un hijo de puta.

¿Nunca se preguntaron por qué hay tanto psicólogo ahora? ¿Por qué la gente siempre tiene cita con el psicólogo? Yo no creo que sea por gusto. Vivimos en una sociedad en la que levantarte cada mañana es un reto, asistir a tus obligaciones como estudiante o como trabajador es un gran esfuerzo que hay que hacer a diario...

Vas por la calle, te puedes juntar con gente... y en cada rincón del planeta siempre habrá una persona hipócrita que lo único que procurará hacer es joderte la vida. Porque sí, de esas personas sobran a patadas.

Yo ya me cansé hace mucho tiempo de que la sociedad en la que vivimos sea tan jodida. Me cansé de que los peces gordos puedan hacer con nosotros lo que les salga de los huevos, porque señoras, señores, ellos nos manejan por mucho que podamos decir que no. Ellos hacen de nosotros lo que quieren, nos tienen muy bien agarrados. Hay gente que se da cuenta, pero muchas personas no.

Nos hemos convertido en unas simples marionetas, pero, eso sí, ante todo la comodidad: queremos que todo nos lo den hecho. Estamos hipnotizados por la tv, seguimos a las personas como si pareciésemos simples ovejas que seguimos al rebaño.

Señoras, señores, niños y niñas, tenemos que comenzar a pensar por nosotros mismos, a hacer el esfuerzo para nosotros sin dañar al prójimo... debemos comenzar a ser libres.

Piensen por un instante en lo que escribí, háganlo...